En el artículo de hoy os voy a explicar como realizo yo esta tarea de nivelación y recoronado de los trastes, proceso tedioso y meticuloso del cual depende la correcta funcionalidad de la guitarra, y que nos permitirá ajustar la acciòn segùn las preferencias del guitarista evitando los indeseables trasteos. Soy consciente de que solo con leer el título a más de uno le entrará temblor de piernas, pero que en realidad, teniendo claros unos pocos conceptos y siendo meticuloso en el trabajo, es una tarea que puede podéis realizar perfectamente. Para ello, vamos a necesitar las siguientes herramientas y/o consumibles:
- Una regla dentada donde coinciden los trastes para librar estos y que le permita apoyar directamente en la madera del diapasón. En mi caso la he diseñado y hecho mediante corte por láser, pero también la podéis hacer con una pletina de aluminio de unos 3 mm de grosor y con una lima o la dremel y una fresa de tungsteno haciéndo las muescas donde coinciden los trastes.
- Una regla con total planitud. Yo la he comprado en una casa dedicada a este tipo de material, pero en ferreterías también podéis encontrarlas, yo tengo una muy similar, que en su día compré en Carrefour.
- Un perfil de aluminio de unos 40 cm de largo y 2.5 de ancho por 4 de alto. Para facilitar el trabajo y debido a la ligereza del aluminio, he metido por dentro unos cuadradillos de hierro macizo para añadir peso y que deslice mejor y va realmente bién. Como podéis ver, las herramientas se pueden conseguir fácilmente y sin complicarse la vida.
- Lijas de diferentes granos: de 400 es la que yo uso para pegar con cinta de doble cara debajo del perfil de aluminio. Es un grano que parece que no, pero come bastante, pero no tanto como para pasarte, un grano ideal. Luego necesitarémos lija para pulir, grano de 800 a 2000 es ideal.
- Limas: Yo tengo de todas las habidas y por haber, incluso una de diamante de grano 300 con la forma del traste que se pude conseguir en stew mac o G&W pero también os digo, que a pesar de que cuestan un ojo de la cara, a penas la uso porque come demasiado y te puedes pasar fácilmente sobre todo en los extremos de los trastes, por este motivo, en su lugar uso una limita plana también de diamante que me compré en el Lidl el juego completo por 8 € y va de lujo, para mi gusto, la mejor.
- Cinta de carrocero para proteger el diapasón.
- Algodón mágico.
- Un soporte para colocar el mástil y que permita hacer el trabajo de forma sencilla y precisa y sin que cabecee. Yo me he construido uno a partir de DM y unas cunas del mismo material rematadas con espuma adhesiva para que asiente bien el mástil y no sufra daños.
Como veis, todo lo que vamos a necesitar es fácil de conseguir y no hay necesidad de gastarse un dineral para conseguir unos resultados muy muy buenos. Pués vamos manos a la obra:
Lo primero que hago es tratar de poner el mástil lo más recto que sea posible manipulando el alma. Para ello me valgo de la regla troquelada donde coinciden los trastes. Primero pongo el mástil a la algura del ojo, en posición como si estuviera disparando una escopeta de perdigón de estas que usábamos de adolescentes y esto me da una noción de si necesito tensar o relajar el alma. Vamos probando y colocando la regla hasta que quede como digo, lo más recto que nos sea posible.
Aquí lo tenemos, así que, el siguiente paso es proteger todo el diapasón con cinta de carrocero. Esta tarea es un muy sencilla, pero algo aburrida, al menos para mi, porque me puede el ansia de comenzar con el trabajo propiamente dicho jejejee y hay que hacerla para proteger el diapasón de las limas.
Una vez bien protegidito, con un rotulador endeleble de estos que tienen la punta gruesa y recta marcamos todos los trastes. Esto nos permite una vez que comencemos a nivelar ver qué trastes se gastan primero (los más altos) y cuales quedan intactos (los más bajos). Este dogma grabadlo a fuego, porque es la esencia de lo que pretendemos conseguir. Hay que nivelar, hasta que solo quede un traste con el rotulador intacto (como los Inmortales, solo puede quedar uno, recordadlo), cuando lleguemos a este punto, ya sabemos que esa es la cota más baja y debemos seguir nivelando hasta alcanzarla, mucho ojo aquí, hasta que consigamos rascarle el rotulador a todo ese traste, este será el indicativo de que hemos alcanzado la misma cota en todos los trastes y estarán perfectamente nivelados.
Pues comenzamos a nivelar con el taco de aluminio al que le hemos pegado con cinta de doble cara por la parte de abajo la lija de grano 400.
Vamos describiendo movimientos sin apretar, solo con el peso del perfil (si le hemos introducido peso por dentro, mucho mejor) de atrás hacia adelante y de derecha a izquierda. Es muy importante una vez que hacemos esto unas tres o cuatro veces, parar y analizar el estado en que se encuentra cada traste. Yo suelo marcar con un rotulador negro las zonas donde al pasar el taco, no se ha comido nada, es decir, están más bajos.
En esta última foto, vemos el taste crítico (la línea dentada negra), este es el más bajo de todo el diapasón, hay que seguir nivelando hasta que el rotulador de este traste se vaya ligeramente, con cuidado de no lijar más de lo necesario. Una vez nivelado el diapasón, quedaría según se muestra en la foto, con su polvillo característico.
Aspiro todo bien y me queda así:
Ahora unos trastes han quedado más comidos y otros menos, pero están todos al a la misma cota que es lo que nos interesa. Antes de continuar, y con la ayuda de la regla, compruebo que efectivamente estén todos a la misma altura, todo indica a que esto debe de ser así, pero bueno, después de unos cuantos años trabajando en control de calidad, mi instinto me lleva a realizar la comprobación. Como todo va como cabía esperar, marco de nuevo todos los trastes para proceder a lo que los ingleses llaman el “Dressing” que no es otra cosa que volver a reconstruir la corona del traste dándole la forma redondeada. Esto dicho así asusta un poco como a “Tierra trágame y devuélveme en Punta Cana”, pero creedme que no es para tanto!
Yo lo que suelo hacer es limar el costado del traste e ir comiendo hasta el centro del traste, esto se hace por cada lado hasta que nos quede una línea, lo más fina posible de color rojo, sin limar nunca por encima de ella borrándola porque entonces habremos estropeado todo el trabajo realizado hasta ahora y habría que nivelar de nuevo, por eso, mucho cuidado que este paso es crítico.
También me valgo de una lima diamantada muy cara, para ayudar un poquito, pero vaya, que no es necesaria para nada, no os preocupéis si no la tenéis que no es imprescindible. Si no disponéis de esta limita diamantada que como os comente la conseguí por muy poco dinero en el Lidl, podéis usar una normal triangular, como estas de bellota. Le coméis con el esmeril un poco las tres aristas para que no os marquen el diapason y sirve perfectamente, a decir verdad es lo que mejor funciona para mi… Hecho esto, lo tenemos!!! el trabajo está casi listo, ya solo nos falta eliminar los arañazos que dejan las limas y pulir, parece sencillo, y lo es. Yo uso primero una lija de 400 para lijar los costados de los trastes. luego paso un estropajo de fregar los cacharros y aunque parezca una tontería, deja el traste muy uniforme en cuanto a arañazos se refiere, a veces uso la Dremel con un disco abrasivo y va muy bien también.
A continuación le paso una lija de 1500, la podemos mojar con agua para facilitar la tarea aunque esto enguarra un poco más la cinta de carrocero y la puede incluso deteriorar, si el diapasón es de ébano o palo santo no pasa nada, si es de arce, mucho cuidado porque es más blando y se marca más fácil y también se ensucia con facilidad. Hecho esto secamos con un trapo viejo que tengamos por ahí y le damos con algodón mágico, que no sè si sigue existiendo, pero en su día me compré varios botes y tengo pa darle al pueblo jejejeje. Pulimos con un paño seco y voilá!!! nos han quedado perfectamente nivelados, redondeados y relucientes, así sí da gusto tocar!!!
Una vez hecho esto, compruebo de nuevo con la regla, pero esto ya por vicio y por satisfacción, porque si hemos hecho bien el trabajo, éste ha debido de quedar perfecto. Le paso una galga de 0.10 y no se cuela absolutamente por debajo de ninguno de los trastes, lo que nos está indicando que cuando nos ponemos en serio, nos ponemos!!!
Del mismo modo y con ayuda del fret rocker (que también diseñé e hice mediante corte por láser, aunque los he visto en Amazon baratos) vamos comprobando todos los trastes, de tres en tres buscando zonas donde el traste del medio haga de punto de apoyo y se tambalee sobre los otros dos, indicando que dicho traste está más alto. Aquí, lo mismo, si hemos hecho bien el trabajo, y si la regla nos indica una total planitud, el rocker debe asentar perfectamante sin bailar.
Pues tenemos el trabajo hecho amigos, y de una forma muy simple y efectiva, aunque laboriosa eso sí, una cosa no quita la otra jejeje pero el resultado es espectacular en cuanto a estética y tacto, y la satisfacción que se siente de haber hecho un buen trabajo no la paga nada en el mundo. No sé si os dije, pero también es conveniente en el ángulo de los extremos de los trastes, darle unos toquecitos con la lima de diamante (antes de pasar las lijas y pulir) para que quede más suave y no nos haga daño en la mano al tocar, así se sentirá mucho más suave. Pues nada, ya tenemos nuestra guiti lista para ajustar la cejuela y encordar. Cualquier duda que tengáis o sugerencia, serà bienvenida. Hasta la próxima!
Aquí os dejo un pequeño vídeo para que veáis el proceso:
https://www.youtube.com/watch?v=TBbQX1m8j8g&t=4s
Nacho
Muchas gracias por tu explicación!! Me ha servido de gran ayuda
Carlos BV
Me alegra mucho Nacho, cualquier duda no dudes en preguntar. Un cordial saludo.